En 1999, los hermanos Ballvé-Olcese compraron el 5.4 por ciento de Telepizza, a partir de ese momento comenzó una nueva etapa, muy distinta a la que se había vivido con Leopoldo Fernandez Pujals. Se encontraron un negocio con muchas posibilidades pero en malas condiciones, por lo que tuvieron que pasar años de reconversión y de saneamiento, hasta conseguir estabilizar la situación de Telepizza con un nuevo enfoque y la necesidad de cumplir determinados parámetros exigidos por Permira. Los temas que se abordan en el caso permiten tratar cómo influye la configuración institucional en la manera de dirigir la empresa, las distintas operaciones financieras que se llevan a cabo para la compra y fusión de distintas empresas, cómo influye la bolsa en la dirección, cómo se vive un cambio de estrategia y saneamiento de una empresa, los procesos de internacionalización y otros temas más concretos de negocio. Telepizza es una compañía que no cesa a la hora de innovar tanto en productos como en procesos. Su instalaciones fabriles están dotadas de una tecnología del más alto nivel, siendo considerada una de las mejores fábricas de su sector, al igual que ocurre con su plataforma logística. La inversión que se ha llevado a cabo a lo largo de estos años en I+D+i en Telepizza ha sido y es destacable.”
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