Con una experiencia media de 15 años y una media de edad de 38 años, los empresarios y directivos que han finalizado con éxito el Programa PYMEX de nuestra escuela celebraron, con las medidas de seguridad e higiene oportunas, la clausura de esta Promoción del Programa.
La Lección Magistral del acto, que tuvo lugar a las 20:00h en la sede de Sevilla, estuvo a cargo de Juan Ramón Hernández Pérez, director general de PERLAHUELVA FRUITS EXPORT, S.L.; miembro del Consejo Asesor del Centro de Excelencia para la Pyme de San Telmo.
Además, han participado en esta clausura: El director general Juan Pérez Gálvez; Pablo Pérez Fernández, director de esta edición del programa PYMEX; y Francisco Fernando Hernández de Guzmán, presidente de la promoción que concluye.
Las reglas del juego en la empresa
Juan Ramón, antiguo alumno de este mismo programa, contó a los asistentes cómo había sido su experiencia dentro de nuestras aulas cuando, hace tres años y tras dieciocho como empresario, decidió realizar este programa.
Juan Ramón comenzó su carrera profesional como emprendedor fundando su primera empresa en 2003. Posteriormente, creó algunas empresas más y tras varios años en la dirección de Perlahuelva, vio que era el momento para iniciar esta aventura formativa. Perlahuelva tiene su base de operaciones en Rociana del Condado, desde donde produce, almacena, empaca y exporta fruta fresca de la más alta calidad hacia los mercados más importantes del mundo.
Juan Ramón comenzó su carrera profesional como emprendedor fundando su primera empresa en 2003. Posteriormente, creó algunas empresas más y tras varios años en la dirección de Perlahuelva, vio que era el momento para iniciar esta aventura formativa. Perlahuelva tiene su base de operaciones en Rociana del Condado, desde donde produce, almacena, empaca y exporta fruta fresca de la más alta calidad hacia los mercados más importantes del mundo.
Para él, los cambios en su empresa habían sido notables desde que inició el programa en 2017, hasta la actualidad. “Siempre digo que antes del PYMEX, yo estaba jugando a un deporte del que desconocía las reglas. Tuve la suerte de que el viento me venía de popa y el barco avanzaba, pero no tenía claro dónde quería ir” afirmó. Explicó que, tras finalizar el programa “encontré un propósito y puse todo mi esfuerzo en aprender cómo llegar a ser mejor empresario y mejor persona”. Expuso que, al tener las herramientas y los conocimientos suficientes para dirigir mejor la empresa, supo “cómo adaptar las velas a la dirección e intensidad del viento que soplara. Ahora sabemos dónde estamos y hemos definido un destino para llegar”.
Ante la cuestión “¿qué hemos conseguido cambiar en PERLAHUELVA en este periodo de tiempo?” el director general de esta empresa habló de los hitos que él consideraba más importantes.
Comenzó con la definición del modelo de negocio, del que afirmó ser un proceso fundamental para conocer realmente la empresa, el sector y el papel que juega una compañía en la cadena de valor.
En segundo lugar, habló de la creación de un plan estratégico que marque la ruta y sea el foco. “Este plan estratégico es como el plan de viaje de una familia que se va de vacaciones a otro país. Así que en vuestras empresas no salgáis de viaje sin vuestro plan” afirmó.
Asimismo, señaló la importancia de la creación de una Misión compartida, redactada y creada por todos los trabajadores, que dé sentido y propósito a la labor diaria de todos y cada uno. También comentó el valor de la implantación de un sistema de gestión por desempeño, ya que ayuda a alcanzar la excelencia profesional y la mejora continua de los trabajadores.
Juan Ramón argumentó la necesidad de un plan de formación como pilar de apoyo de cualquier empresa, llevar a cabo un control financiero y presupuestario, el desarrollo de un plan comercial y la creación de un buen organigrama con la definición de las obligaciones y responsabilidades de los colaboradores.
Primero la formación y después la acción
Para Juan Ramón después de los conocimientos adquiridos, lo más importante es pasar a la acción “Porque sin acción no hay nada. La mayor garantía de fracaso es no hacer nada”. En la misma línea, recordó a los asistentes la responsabilidad que tendrán sus actos en la sociedad “Sois unos elegidos y unos afortunados. Debéis liderar no solo a las empresas, sino también a personas. Como líderes que seréis, debéis de ser ejemplo para los demás. Debéis ser buenas personas, no de palabra, sino con la acción diaria” argumentó.
En su lección magistral el director general de PERLAHUELVA hizo hincapié en poner pasión y amor en el trabajo “Una empresa sin pasión y sin amor, es una empresa sin alma. No os resignéis a la mediocridad y sed constantes. No se planta hoy la semilla para que su fruta esté disponible al día siguiente” afirmó.