En el año 2007, Linda Schuman tenía 51 años. Vivía en Navas de San Juan, un pueblo de cinco mil habitantes en la provincia de Jaén, en Andalucía. Linda, que era estadounidense, había tenido una carrera brillante en el sector editorial, hasta que hace tres años dejó su puesto de Directora de Marketing y Adjunta a la Dirección General del Grupo Pulso, S.A., para irse a vivir a Navas.
Su marido Javier y los hijos de ambos, Francisco de 17 años y Yolanda de 14, se habían trasladado allí desde Barcelona en el año 1995, cuando Javier había heredado una finca de olivos de su padre. Desde 1997 Linda había estado viajando entre Navas y Madrid, trabajando dos días a la semana desde su casa en Andalucía; finalmente lo dejó en el 2003 para poderse dedicar más a los hijos.
En enero 2007, Linda estaba reflexionando sobre su trayectoria profesional y cuáles deberían ser sus próximos pasos.
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