Se trata de un caso de negociación, con dos roles distintos. Por un lado, el rol del gerente de la Fundación Music Hall y, por otro, el del representante de Nuria Antonelly.
El gerente de la Fundación Music Hall recibe el encargo de contratar a Nuria Antonelly para representar el papel de Sophie en el musical MAMMA MIA!, debido a que un accidente de Kika, la artista inicialmente contratada, le ha dejado sin protagonista del reparto
El representante de Nuria Antonelly trabaja como director en SKYLINE AGENTS, agencia dedicada a la representación de artistas y deportistas de élite. El comité de socios de la firma le encarga la representación de Nuria para negociar su contratación por la Fundación Music Hall. Cree que de su desempeño, dependerá el definitivo ascenso a socio de la Agencia, tras más de diez años trabajando en ella.