En 2011, el grupo Martínez Loriente continuaba capeando exitosamente los efectos de la crisis económica y de consumo, logrando superar los 470 millones de euros en facturación con el trabajo de más de 1.400 trabajadores en plantilla y con 11 millones de beneficio neto al cierre del año anterior. El grupo había experimentado una evolución espectacular desde sus inicios en 1999, cuando fue creada para suministrar en exclusiva productos cárnicos a Mercadona..
En el año 2008, Mercadona cambió la política de fijación del precio final, afectando así a la construcción del PCB (Precio de Cesión Bruto) que mantenía con los interproveedores. Martínez Loriente se vio obligado a reducir el ajustado margen del que disponía. Esto provocó que la empresa asumiera una profunda revisión de todos sus procesos para reducir los costes al máximo.